Belleza: la base de maquillaje y el uso de los polvos (1ª parte)

En 1950 Max Factor crea la base de maquillaje pensando en su utilidad en el cine. Apenas era una pasta compacta que se adaptaba a pocos tipos de pieles por su reducida gama de tonos... pero tuvo muchísimo éxito y hoy en día la variedad de texturas y colores es sorprendente.

Si no encuentras el tono que mejor te va o te has pasado con el color la base de maquillaje se puede mezclar con la hidratante y así rebajarlo.
Para aplicarla yo uso los dedos, así llegas mejor a los rincones menos accesibles a los que no llega la brocha. Las manos te las debes lavar antes y después. Las brochas son ideales para dar las bases más cremosas, yo aconsejo comprar siempre un par de ellas de buena calidad, son más caras pero merece la pena y si las limpias regularmente duran mucho tiempo. También las esponjitas son muy útiles para las bases líquidas y gel sobre todo, sirven además para extender los polvos, pero duran poco incluso lavándolas a menudo, no más de tres meses.
Los ingredientes de una base son variados: siliconas, antioxidantes, pigmentos del color, pigmentos que reflejan la luz, protectores solares... todos ellos harán que la piel luzca perfecta a la vez que la cuidan y protegen por ejemplo de los efectos nocivos de los rayos ultravioletas, de la sequedad, contaminación, pérdida del colágeno, etc...
En el mercado vas a encontrar muchas presentaciones, no olvides tu tipo de piel y cómo es el tono para elegir correctamente:

- Piel seca y madura: en crema disimulará mejor las líneas de expresión, dándole un plus de hidratación.
- Pieles jóvenes y claras: en gel, de textura ligera y cobertura fina.
- Pieles normales: bases líquidas e hidratantes con color, ambas dan un aspecto muy natural, aunque no disimulan biensi hay granitos y manchas.
- Pieles normales y mixtas: una base compacta o una crema efecto polvo, ya que su cobertura es de media a total y su aplicación muy rápida.
- Pieles grasas: base sin aceites y de acabado mate. Cobertura uniforme y sin brillos. Por ejemplo la Anti-blemist de Clinique ha sido elegida una de las mejores bases para pieles grasas con tendencia al acné.

La base en barra sirve para todo tipo de pieles que no sean excesivamente grasas, disimula bien las manchas, su cobertura es buena pero puede potenciar la zona t con algún brillo.
No olvideis que antes de dar la base primero se debe tener la piel perfectamente limpia. Es preferible dársela a la luz del día que no en el baño bajo la luz artifial. Y es mejor ir dando el producto gradualmente, es más fácil añadir que quitar. La clave está en extenderla bien para que parezca una segunda piel, que casi no se note que vas maquillada, el aspecto tiene que ser de lo más natural.
Según algunas encuestas son consideradas de las mejores:
- Color clone hydra 24 horas de Helena Rubinstein: unos 40 euros
- Base reafirmante y activadora del colágeno de Estée Lauder: 43 euros
- Base luminosa de Georgio Armani: casi 50 euros
- Base equilibrante, con silicona de Yves Saint Lauren: unos 42 euros, pero deja la piel perfectamente maquillada y muy suave.
Ahora, como siempre digo no es necesario gastarse mucho dinero para tener una buena base, os dejo una foto de las que tengo yo:

Aunque tengo varias siempre uso la base de Lancôme photogenic lumessence y acabo con unos brochazos de los polvos sueltos de Clinique. Si la ocasión es más especial los polvos bronceadores terra sun de Maybelline New York te deja la piel genial. Yde lo que nunca prescindo sobre todo cuando tengo prisa es del mosaico de New York Colors te dará un aspecto super-natural, no parecerá que vas maquillada pero tu rostro estará como más luminoso.