miércoles, 1 de diciembre de 2010

No te pongas colorá (1ª parte)

El uso del colorete y del iluminador no es tan fácil como puede parecer a simple vista... la forma y el tamaño de las mejillas son muy importantes, muchas mujeres lo ignoran y además se pasan con la cantidad por lo que parecen "heidis"
Principalmente hay cinco tipos de pómulos: altos, bajos, pequeños, anchos y centrados. La tradición marca que los altos son los ideales, se asociaban con la aristocracia y eran reflejo de salud, fuerza y juventud.
Para saber cómo son tus pómulos simplemente ponte frente a un espejo y sonríe:
- Si los pómulos parecen moverse hacia los ojos y parte superior de las orejas: son altos
- Si se forman dos montículos muy marcados: son centrados
- Si casi no resaltan al sonreir: son pequeños
- Si parecen comenzar en los ángulos de la boca hacia la parte inferior de las orejas: son bajos
- Y si se separan mucho: son anchos.
Algunas actrices clásicas se extraían las muelas posteriores para que se las marcaran más los pómulos, hoy en día son muchas las famosas que han pasado por quirófano para subirlos y realzarlos. El procedimiento habitual es poner silicona... pero nosotras vamos a servirnos mejor del maquillaje:
- Unos pómulos altos (como los de Uma Thurman) suelen coincidir con rostros alargados y ovalados, si te aplicas mal el colorete el resultado será aún más "puntiagudo" así que date sólo unos toques debajo del ojo desde su mitad hacia el borde de la cara.
- Los pómulos pequeños (como los de Charlize Theron) son habituales en caras redondas, con dos toquecillos ni muy cerca ni muy lejos de la nariz valdrá, y de forma ascendente.
- Pómulos anchos (como los de Kate Moss) son típicos de caras cuadradas y redondeadas. Son reflejo de una mandíbula ancha, así que hay que dar una pequeña cantidad de producto en la zona más exterior del pómulo.
- Para realzar unos pómulos bajos (como los de Cameron Diaz) darás unos toques de manera ascendente cerca del borde de los mismos para que no parezcan como caídos.
- Unos pómulos centrados (como los míos y los de la novia de Spiderman: Kirsten Dunst) son de por sí carnosos así que no hay que resaltarlos mucho, basta con un toquecito de rubor donde sean más prominentes, para que no parezcan ir maquillados.
Una cosilla: nunca te apliques el colorete en línea recta porque arruinarías todo el maquillaje.
El mejor amigo del colorete es el iluminador, hay que aplicar un poquito de polvo tanto en la parte superior del pómulo como debajo de las cejas y el resultado alrededor de los ojos será asombroso, también te puedes dar una manita en la barbilla, nariz y sienes... el rostro parecerá más saludable, lleno de vitalidad.
No uses la misma brocha para ambos y no olvides difuminar bien para que no se note que llevas dos productos. No des el iluminador debajo del colorete ¡¡¡NUNCA!!!
- Pómulos altos: el iluminador va hacia las sienes, aportarás amplitud a una cara alargada.
- Pómulos pequeños: cerca del borde exterior del ojo y en su parte inferior, usa muy poca cantidad.
- Pómulos anchos: no llegues a la sien, como el colorete te lo habrás dado en la parte más externa rellena con el iluminador justo por encima.
-Pómulos bajos: como se trata de realzarlos hay que hacer lo mismo que con el colorete, unos toquecillos ascendentes en una de las partes más carnosas del pómulo.
-Pómulos centrados: desde el ángulo externo del ojo hasta la sien. Se trata de restarle protagonismo al moflete. Es decir de la mitad hacia atrás, ligeramente ascendente o parecerás una "pepona".
He hecho una foto a los productos que podeis encontrar en mi neceser, no es que haya probado o tenga muchos pero de momento prefiero el de Bourjois:

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